Por Rick Warren
“No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho. Así experimentarán la paz de Dios, que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará su corazón y su mente mientras vivan en Cristo Jesús”. Filipenses 4:6-7 (NTV)
Si te sientes agobiado o confundido por una decisión que estás tratando de tomar, probablemente estás atrapado dentro de ti mismo y no escuchas la voz de Dios. La Biblia dice: «porque Dios no es un Dios de desorden, sino de paz«. (1 Corintios 14:33 NVI). Él no es el autor de la confusión. Entonces, si te sientes confundido, ¿adivina qué? No es la voz de Dios hablando en tu vida.
Si eres padre, ¿quisieras que tus hijos se sientan presionados o confundidos cuando les pides que hagan algo? No. Quieres que entiendan lo que tienen que hacer y luego responden en obediencia. Dios el Padre quiere lo mismo para nosotros y de nosotros.
El único momento en que la presión podría ser legítima es si Dios te dice que hagas algo, y sigues diciendo que «no». Entonces la presión se acumula. Pero siempre hay paz cuando dices «sí» a lo que Dios te pide que hagas.
Satanás quiere dirigirnos compulsivamente, pero Dios quiere atraernos compasivamente. Satanás quiere aprovechar nuestras compulsiones y usarlas para dirigir nuestras vidas. Pero Dios es nuestro buen pastor. Él quiere atraernos hacia él y Su paz.
Peter Lord, es un pastor que respeto profundamente, él solía decir: «El noventa por ciento de lo que Dios quiere decirte es alentador». Si los mensajes que escuchas de Dios son todos negativos, algo anda mal. Los cables han sido cruzados.
Si sientes que Dios te dijo que hicieras algo, pero estás cada vez más ansioso por eso, entonces los cables han sido cruzados. Algo no está bien.
La Biblia nos dice: «No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho. Así experimentarán la paz de Dios, que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará su corazón y su mente mientras vivan en Cristo Jesús» (Filipenses 4: 6-7 NTV).
Reflexiona sobre esto:
- ¿Con cuál decisión te sientes preocupado, ansioso o preocupado? ¿Crees que esto es algo que Dios te dijo que hicieras?
- Piensa en una decisión que estás enfrentando en este momento. ¿Qué parte de Filipenses 4:6-7 ya estás haciendo, y qué parte necesitas comenzar a hacer?
- ¿Qué te ha dicho Dios que hagas y no has obedecido? ¿Cuál ha sido el efecto?
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